10 Restauración de Piedra
METODOS DE CONSERVACION Y RESTAURACION DE LA PIEDRA
- Limpieza y tratamientos de protección
- Reposición para la restauración
El éxito total de un tratamiento de conservación y restauración de piedra depende mucho de la precisión y de la limpieza estética, la limpieza es una acción necesaria para la conservación de la piedra expuesta al aire libre porque permite trasladar de la superficie productos peligrosos tales como las sales solubles o sales catalizadas por la oxidación del dióxido de azufre. Una limpieza efectiva, nos prepara la superficie de la piedra para la aplicación de un consolidante o un agente protector.

Pero el proceso de la limpieza de la piedra es también un proceso peligroso, por ello debe ejecutarse con sumo cuidado, si resulta que la piedra origina la aparición de nuevas grietas y la deposición de sales solubles en los poros no se puede evitar, esto producirá en el futuro una degradación incluso más activa. Con lo cual, para ejecutar una limpieza sana, habrá que seguir las siguientes pautas:

a) Evitar trasladar el objeto original.
b) Intentar no dañar ni abusar mecánicamente de la piedra. La piedra es un material muy sensitivo a golpes, rasgados, etc… cualquier grieta superficial reduce su fuerza y permite la penetración del agua.
c) Evitar la formación de sales solubles en los poros. Existen métodos ofrecidos por la moderna tecnología en la conservación que ofrecen un resultado óptimo. Estos tratamientos requieren un personal especializado, su costo por tanto es mayor que otros métodos comunes.
Una intervención de restauración incluye estos tratamientos:- Limpieza. – Consolidación. -Protección.

Su solución y ejecución dependen del estado de conservación de la piedra, por ejemplo, cuando sea posible lo mejor es empezar por la limpieza, si la piedra está muy deteriorada, incluso la limpieza menos agresiva puede dañarla, es entonces mejor consolidar la superficie dañada.
Es importante evaluar los efectos de un consolidante dado, y juzgar tanto el producto como el método de aplicación. Limpieza: El intento de limpiar una piedra es de eliminar productos peligrosos, como sales solubles en agua, incrustaciones insolubles, polvo y hollín, microflora, etc.
Para ser un tratamiento de conservación el método de limpieza debe respetar los siguientes criterios:
a) El método de limpieza debe de ser efectivo y trasladar las sustancias peligrosas de la superficie de la piedra.
b) La acción de la limpieza debe de ser lo suficientemente lenta como para permitir un control por parte del operador.
c) El método de limpieza no debe permitir la presencia de productos tales como las sales solubles de agua que son peligrosas para la futura conservación de la piedra.
d) El método puede causar una fuerte abrasión, microfisuras, o discontinuidad en la piedra, lo que puede fomentar un mayor deterioro. En otras palabras, la limpieza es necesaria para la conservación de la piedra, pero debe de ser llevada con muchísimo cuidado, para evitar realizar daños.
Hay que asegurar la eliminación de las sustancias peligrosas, así como la menor perdida de piedra original.

Los métodos de limpieza se pueden clasificar en cuatro grupos:
a) Métodos al agua.
b) Métodos químicos.
c) Métodos mecánicos.
d) Métodos basados en calor.
Consolidación: Los objetivos de un tratamiento de consolidación son: Mejorar la adhesión y cohesión de los materiales y minerales que componen la piedra. Conseguir una buena cohesión de las partes deterioradas con las partes mejor conservadas.
Conseguir un incremento de la resistencia mecánica de la piedra consolidada. Una profunda penetración en la piedra sin discontinuidades es extremadamente importante para el éxito de la consolidación, que depende de la estructura porosa de la piedra, las propiedades físico-químicas de los consolidantes y el modo de aplicación de la solución así como el tiempo de contacto con la piedra.

Se entiende por consolidación a la aplicación de productos adhesivos, por impregnación, pulverización, goteo, inyección, inmersión, e incluso en algunos casos, mediante cámara de vacío para asegurar la penetración. Protección: Una protección se aplica después de una limpieza, reintegración y consolidación correcta del material pétreo.
Existen infinidad de preparados en el mercado con propiedades repelentes al agua, estas sustancias protectoras son siliconas de fácil aplicación, principalmente aplicadas a brocha o mediante pulverizados.
Existe otro tipo de protección basado en la aplicación de ceras microcristalinas, estas se presentan en diversos grados de fusión, obteniendo menor retención del polvo, etc.
Se prefieren los de punto de fusión de 90º centígrados, a los que se le confiere menor brillo y permeabilidad. En algunos casos, materiales que contienen sales solubles que no pueden ser extraídas, se han impregnado con ceras para bloquear la movilidad de las sales frente al vapor de agua
- Ejercicio:
